Hoy, hemos querido hablar con los compañeros de ANOVO, una de las empresas más importantes en España de servicios postventa en tecnología, sobre cómo se están preparando los SATs para el crecimiento y la diversificación de los dispositivos electrónicos asociados con el Internet de las Cosas.
Seguro que conoces qué es el Internet de las Cosas, también nombrado por las siglas IoT (Internet of Thing). Un término que se utiliza para reunir a todos los dispositivos cotidianos que se conectan a internet: electrodomésticos, equipos de domótica, enchufes, wearables, vehículos, smart speakers, etcétera.
Según la segunda edición del informe Things Matter que elabora Telefónica, el uso de este tipo de dispositivos ha aumentado un 66% en los dos últimos años. Y lo que es más significativo, el 87% de sus usuarios declara que no renunciará a sus beneficios una vez probados.
Los responsables de desarrollo tecnológico que han sido entrevistados para la realización del informe han afirmado la intención de seguir aumentando la variedad y cantidad de dispositivos y soluciones IoT. Un claro ejemplo es el “coche conectado”, una apuesta de los fabricantes cada vez más presente en el sector. También los dispositivos diseñados para optimizar la eficiencia energética en los hogares. O las fábricas o industrias conectadas de principio a fin. El Internet de las Cosas ha llegado para quedarse y, según parece, irá a más.
¿Cuáles son los dispositivos IoT más vendidos?
El estudio Things Matter revela que los usuarios de IoT incorporan a su día a día aquellos objetos conectados que les aportan un “beneficio objetivo”. La experiencia integral, la sostenibilidad y la eficiencia energética son otros valores relacionados con el uso de estos equipos.
Entre los “objetos conectados” que mayor crecimiento están experimentado en términos de ventas o de intención de compras comparando de 2017 a 2019 destacan:
- El smartwatch: de un 14,8% a un 26,1%
- Los dispositivos de coche: del 2,9% al 8,8%
- Electricidad inteligente: del 2,7% al 7,6%
- Trackers de vehículos: del 4,2% al 6,3%
- Enchufes smart: del 3,4% al 6,0%
En el siguiente cuadro os dejamos todos los dispositivos reseñados en el estudio:
Como vemos en el gráfico, el uso de smartwatches, que ya sobresalía en 2017, sigue creciendo seguido de los dispositivos de coche y los de electricidad inteligente. En el apartado de intención de compra en los próximos meses también destacan las Smart TV.
La movilidad conectada
Los avances en el “coche conectado” desde 2017 hasta 2019 has sido muy notorios. Para los principales fabricantes, la incorporación de la tecnología a sus vehículos ha desempeñado un papel muy relevante impulsado, también, por las nuevas tendencias de consumo.
La capacidad de crear una red wifi en el interior de los automóviles ha conseguido que los usuarios puedan seguir conectados a su entorno digital dentro del vehículo, ya sea para el consumo de información, entretenimiento o navegación.
Por otra parte, también son muy valoradas por los consumidores, las soluciones de seguridad al volante relacionadas con los dispositivos IoT. El acceso a un diagnóstico del estado del vehículo en todo momento contribuye a prever fallos, averías o situaciones de riesgo, por ejemplo. Permite planificar las revisiones en el taller, advertir de movimientos no autorizados del vehículo o mandar un mensaje de socorro en caso de accidente.
Con todo ello, el número de propietarios de vehículos conectados se ha triplicado en estos dos últimos años.
Smart Cities
En el entorno urbano es donde se encuentra una mayor diversidad en la aplicación de soluciones IoT. Sensores y otros dispositivos de medición del aire, el tráfico o la temperatura, por ejemplo, se automatizan y procesan para ofrecer una solución a los diferentes problemas que pueden afectar a los habitantes de las ciudades. Soluciones aplicadas al uso del transporte público, la iluminación inteligente, aplicaciones para la búsqueda de aparcamiento o de incidencias urbanas, etcétera, forman parte de las ciudades conectadas.
“Las personas conectadas”
La oferta de dispositivos y soluciones IoT de uso personal, conocidas como “consumer IoT”, se multiplica cada día. Según la empresa IHS Markit, se prevé que para el año 2030 cada persona cuente con una media de 15 dispositivos conectados.
En este sentido, como refleja el informe de Telefónica, el uso de smartwatch ha crecido un 76,4% respecto a 2017. Según los expertos, el interés del consumidor por conectarse a través de diferentes objetos en lugar que por las interfaces de smartphone y tablets como hasta ahora no ha hecho más que empezar y se duplicará o, incluso, triplicará a corto y medio plazo.
¿Cómo afronta ANOVO este auge de los dispositivos IoT?
Con todo ello, empresas que ofrecen servicios postventa de tecnología como la reparación de móviles y otros dispositivos electrónicos, se enfrentan al reto de adaptarse a la constante salida al mercado de nuevos dispositivos con unos componentes y una electrónica concreta. Desde ANOVO nos cuentan que, en realidad, para los servicios técnicos oficiales esta adaptación lleva ya años en marcha. La salida al mercado de diferentes versiones de un smartphone que incorpora una nueva tecnología como puede ser, por ejemplo, las pantallas plegables, supone la necesidad de invertir en formación y herramientas específicas para atender las necesidades postventa de cada nuevo artículo, nos explican desde este SAT.
En este sentido, empresas como ANOVO destacan la importancia de la especialización de los técnicos, así como la aplicación de la Inteligencia Artificial y el machine learning en los procesos internos, sobre todo en aquellos relacionados con el diagnóstico de incidencias, como forma de contribuir a acelerar el proceso de adaptación de los servicios técnicos oficiales a las nuevas tecnologías.
Desde este blog seguiremos atentos a cómo la aplicación del Internet de las Cosas en nuestro día a día marca el futuro de nuestra profesión. No dudes en compartir con nosotros tu experiencia a través de los comentarios.
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