Lo cierto es que normalmente acabamos conservando las tablets por más tiempo que un móvil, por lo que es más fácil que en algún momento nos encontremos ante algún fallo. No obstante, puede parecer que los fallos de un móvil puedan ser diferentes a los de una tablet, por tanto, ¿existen diferencias entre reparar móviles y reparar tablets?

Averías más frecuentes en tablets

De esta forma, primero hemos recopilado los problemas más frecuentes a la hora de reparar tablets:

Problemas para encender o arrancar

Sin duda, es el más alarmante de todos. Aunque puede que tengamos frente a nosotros un problema de hardware grave, a veces es solo cuestión de software o, aún más sencillamente, que la batería está totalmente descargada. Lo mejor es asegurarse de que no está sucediendo lo último, dejándolo un tiempo conectado antes de decidir que el problema va más allá, porque hay que pensar que sin un mínimo de energía no puede ni siquiera aparecer la pantalla de carga.

Si estamos seguros de que el problema no es la batería, lo mejor es hacer un hard reset para romper el ciclo de carga -normalmente es más sencillo quitar la batería, pero esto es algo casi imposible en los dispositivos actuales-. Si tenemos una tablet Android, tenemos que mantener pulsado el botón de encendido 30 segundos o más, mientras que en un iPad lo hacemos pulsando el botón de encendido y el botón home hasta que aparezca el logo de Apple.

El último recurso que nos queda es restaurar de fábrica, pero hay que recordar que perderemos los datos que no tengamos guardados. Si se trata de un problema más grave, lo mejor y más fiable es acudir a un Servicio Técnico Oficial, que nos ayudará a comprender qué le pasa al dispositivo y a solucionarlo.

Roturas de pantalla

La rotura de pantalla es la avería más recurrente en tablets. Aunque cada vez se emplea más tecnología puntera en ofrecer pantallas más resistentes, estas no son indestructibles. Podemos estar ante dos casos: rotura de la pantalla -táctil, la que reacciona a nuestros dedos-, o rotura del cristal, por la que el dispositivo puede seguir funcionando perfectamente, con el inconveniente de tener el cristal de tu tablet roto.

 

De las roturas de pantalla ya hablamos en nuestro post sobre cuándo acudir a un Servicio Técnico Oficial cuando tienes la pantalla rota. De todas formas, lo que siempre recomiendo en cuanto a las roturas de pantallas es ir directamente a un Servicio Técnico Oficial, pues nos dará una seguridad y garantía que no nos darán en ningún otro sitio.

Problemas de carga

Los problemas de carga suelen ser más comunes, pero a veces pueden suponernos serios inconvenientes. Para comenzar, puedes conseguir más información de cómo está funcionando la tablet en cuanto a la batería gracias a una app de diagnóstico, siendo la principal referencia en este terreno, tanto para iOS como para Android, Ampere. Otra forma de comprobar dónde está el fallo es comprobar con otros cargadores, cables o dispositivos qué es lo que falla exactamente.

Cuando ya hayamos comprobado que el problema está en la tablet, lo primero que tenemos que tener claro es que no se trata de un problema de suciedad acumulada en el puerto de carga -algo que más de una vez sucede-. Si tras confirmar esto, la batería de tu tablet aún sigue sin funcionar, considera la opción de restaurar los valores de fábrica. Igualmente, la mejor opción tras realizar estas comprobaciones y ver que la tablet no reacciona, es ir a un SAT oficial.

Problemas de conexión

Los problemas de conexión son también habituales. Antes de nada, lo más básico es asegurarnos de que no se trata de un problema de nuestra red. Además, nunca hay que descartar la opción de reiniciar la tablet.

Si el problema que tenemos no es que no conecte sino que va lento, puede ser que se deba a una mala cobertura. Lo que puede estar sucediendo es que la red esté emitiendo en un canal demasiado saturado.

Rendimiento

Por último, podemos estar ante un problema de rendimiento, que es incluso más habitual que los problemas de carga, casi inevitables en tablets con cierto tiempo de vida. Si tu tablet va más lenta de lo normal, claramente se trata del software. Lo primero que puedes hacer para corregir el problema es liberar espacio del almacenamiento. Lo segundo, simplemente reiniciar el aparato para que arranque de cero. Lo tercero, comprobar que tenemos todo actualizado -las apps, el software, etc-. Si nada de esto funciona, la mejor opción es acudir, de nuevo, a un SAT oficial, que nos repararán el dispositivo con total garantía.

Entonces, ¿existen diferencias entre reparar móviles y reparar tablets?

Como puedes observar, los problemas y averías de un móvil y una tablet son prácticamente los mismos. Por tanto, reparar un móvil o reparar una tablet no conlleva muchas diferencias. Es cierto que estos dispositivos internamente pueden ser diferentes, pero los problemas a los que se enfrentan en su ciclo de vida suelen ser, para ambos, iguales.

Como ya hemos mencionado anteriormente, aunque te hemos dado varios consejos cuando estos problemas te surjan, lo mejor y más adecuado es acudir a un Servicio Técnico Oficial autorizado para realizar dichas reparaciones. De esta forma, tendremos unas garantías que, si lo reparamos nosotros mismos, no vamos a conseguir. Tratándose de unos dispositivos que requieren un esfuerzo económico bastante grande, no es aconsejable intentar repararlos uno mismo.

Esperamos que te hayamos servido de ayuda. Puedes dejarnos tus dudas o sugerencias en comentarios.